Gerardo Aguilar
Creador de contenido digital de entretenimiento desde 2018. Amante del rock clásico e historias de ciencia ficción.+ info
Con The Walking Dead listo para concluir su última temporada este otoño, los fanáticos esperan ver cómo los showrunners elegirán terminar la historia. Hay tantos personajes que los fanáticos han aprendido a amar y favorecer a algunos de ellos, lo que hace que el misterio de los momentos finales sea aún más intimidante. Sin embargo, aunque es un espectáculo serio, no todas las escenas resultan estresantes e intensas. Hay varias divertidas en esta serie que dejan espacio para una o dos risas y los fanáticos han dicho cuáles.
Cuando Merle (interpretado por Michael Rooker) quedó atrapado en un automóvil rodeado de caminantes, sostiene su botella y finge darle un sorbo a uno de ellos. Si bien esta no es la escena más divertida de la serie, los fanáticos que hicieron una votación por la web Ranker, parecen opinar que sí. Una de las razones por las que los fanáticos podrían preferir este momento es que es tan ridícula y Merle está en tal estado de angustia que parece que solo está tratando de restarle importancia a una situación grave para no entrar en pánico.
En la tercera temporada después de que el grupo despeja la prisión y comienza a investigar más a fondo, encuentran un grupo de prisioneros sobrevivientes escondidos. Daryl (Norman Reedus) intenta mostrarles cómo tratan a los caminantes de manera organizada pero los prisioneros atacan a los caminantes de forma brutal. Esta escena resulta muy divertida para los espectadores porque atacan a los muertos vivientes de una manera exagerada, como si estuvieran en medio de un motín en la prisión.
A veces, la naturaleza seria de Rick Grimes (Andrew Lincoln) lo supera, lo que resultó en un par de momentos humorísticos. Cuando intenta investigar las provisiones de los prisioneros de la prisión en la temporada 3, abre una hielera y descubre que los hombres la habían estado usando como baño. Es probable que los fanáticos encuentren esta una de las escenas más divertidas de la serie debido al arrepentimiento inmediato en su rostro.
Una de las mejores decisiones que toma Carol (Melissa McBride) a lo largo de The Walking Dead es interpretar el papel de una mujer inocente e indefensa cuando no está segura de poder confiar en alguien. Los fanáticos encuentran su reacción particularmente ridícula y divertida porque cuando le presentan al Rey Ezekiel (Khary Payton) y su tigre, elige actuar asombrada en lugar de completamente aterrorizada y vacilante.